El deporte se puede vivir de muchas maneras. Para algunos, es un trabajo; para otros, un estilo de vida. Para Agustina Landers, atleta tucumana, correr es una prioridad; y además de ayudarla en cuestiones personales, también le trae réditos en cuanto a lo deportivo. Al menos lo hizo en tiempos pasados y también en el arranque de 2024.
Especialista en carreras que van desde los 10 hasta los 21 kilómetros, comenzó a correr, siguiendo a su padre, poco antes de cumplir 20 años. “Una vez me llevó con él a Tafí del Valle y nunca me voy a olvidar de esa sensación. Era cuesta arriba, durísimo, sin aire... Pero siempre, a pesar de ese 'sufrimiento', seguías avanzando, siempre podías más. A partir de ahí me quedó como rutina, cada vez que iba a Tafí, salir a correr. Me encantaba, me desconectaba de todo y cada vez podía subir más”, recuerda en diálogo con LA GACETA.
Después de un tiempo corriendo, decidió anotarse en una carrera de 10km, justamente en Tafí. Y para su sorpresa, terminó en el primer puesto. “Después de eso empecé a entrenarme y se fue dando todo bastante rápido”, reconoce.
Claro; los buenos resultados empezaron a aparecer tanto en pruebas de ruta como de pista. A fines de 2020, logró su primer podio en un Campeonato Argentino de atletismo, al terminar segunda en la prueba de 5.000 metros.
Al año siguiente, repitió su lugar en el podio (fue tercera) pero, además, consiguió el triunfo en la media maratón de Buenos Aires, posiblemente el resultado más importante de su carrera. Ese logro le permitió, en 2022, representar a Argentina en el Campeonato Sudamericano de media maratón que se llevó a cabo en Buenos Aires. “Es algo que me enorgullece y que me encantaría que vuelva a suceder”, admite, aunque aclara que no es algo a lo que apunte como un objetivo directo. “Sé que si uno trabaja, hace las cosas día a día, es constante y se esfuerza, en algún momento llega. Así se me fueron dando las cosas”, reflexiona.
Landers tuvo que barajar y dar de nuevo
Si bien nunca dejó de competir, en 2023 Landers no tuvo acción en carreras de pista. Según explica, fue un año de muchos cambios, a los que debió adaptarse para reacomodar su carrera y su vida.
“Tuve muchos cambios a nivel personal. Si bien participé en carreras de calle, nunca me pude sentir competitiva. El alto rendimiento y mantenerse en competencia requiere de mucha exigencia por lo que sentía que para poder con todo, necesitaba tomármelo con más calma. Eso significa no poner tanto foco en ritmos, tiempos, entrenamientos específicos”, explica Agustina, antes de ahondar en los cambios que tuvo el año pasado. “Fue un año para empezar a sanar de algunas situaciones que me habían causado daño. Sumado a estos temas, me mudé con mi pareja, me recibí de nutricionista… fueron muchas cosas”.
Por eso, el foco para 2024 fue siempre volver a ser competitiva. “Era lo menos que podía hacer”, afirma.
Y vaya si lo logró. El arranque de este año fue inmejorable, incluso en competencias que no esperaba. En marzo se consagró campeona argentina de trail running, una disciplina que no es su especialidad. “Amo correr donde sea. Siempre acompañaba a mi novio, que es el que corría los nacionales de montaña y yo no corría porque tenía otros objetivos. Sin embargo, siempre me dio curiosidad. Este año se hizo en Catamarca y lo vi como una oportunidad para ver cómo me sentía en competencia. No tenía nada que perder”, cuenta. Y no perdió nada, al contrario: se quedó con la competencia en la modalidad Classic, cuyo recorrido era de 15 kilómetros.
Ese título, además, le dio la clasificación al Sudamericano de la disciplina que se disputará en Villa La Angostura en noviembre. Pero no fue su único logro en lo que va del año. Un mes más tarde, volvió a competir en un Argentino de pista y también hizo podio: fue tercera en la prueba de 10.000 metros.
"La verdad es que fue un día muy feliz. Había ido con un objetivo personal que era reencontrarme en competencia y vivir las sensaciones de estar de nuevo en una pista corriendo. Me encontré disfrutando muchísimo y eso me llevó al resultado que, si bien fue bueno, para mí esta vez fue secundario. Sé que puede ser muchísimo mejor”, expresa Agustina.
La atleta considera que correr es mucho más que un deporte
Para Landers, correr no es simplemente su trabajo, ni tampoco una disciplina: ocupa un lugar vital en su vida. “De chica siempre fui muy poco expresiva. Me costaba mucho sacar afuera las emociones, por lo que mi forma de canalizar situaciones siempre fueron a través de la actividad física”, sostiene. “Más allá de los resultados y lo estrictamente deportivo, para mi correr no es sólo un deporte. Me ha hecho salir de lugares de mucho sufrimiento y me ha hecho tener objetivos, metas, creer en mí. Me ha hecho crecer un montón y conocer grandes personas, incluso a mi novio. Por eso siempre digo que, para mí correr es sentirme viva”, reflexiona la atleta de 28 años.
Incluso, el deporte encajó a la perfección con su vida personal. No sólo en cuanto a las relaciones forjadas, sino también respecto a su carrera profesional, aún cuando la nutrición le llamó la atención antes de empezar con su trayectoria deportiva. “Me gustaba mucho la actividad física, y empecé a notar que escogiendo los mejores alimentos con mejores nutrientes, rendía muchísimo mejor tanto en el deporte como en la vida misma. Empecé a tener curiosidad y nacieron mis ganas de estudiar nutrición”, detalla, aceptando que fue complicado compatibilizar el estudio con el deporte. “Muchas veces hice dobles turno. Me levantaba temprano, entrenaba, corría, hacía gimnasio, iba a la facultad, volvía a casa y salía al segundo turno. Obviamente era mucho cansancio, pero nunca puse en duda llegar a la meta, que era recibirme”, asegura.
Landers proyecta un año sin mayores presiones, pero con los sueños siempre presentes. “Me he planteado algunos objetivos pero la idea es más que nada remontar, volver a poner un poco más el foco y sentirme competitiva. Soy bastante soñadora y me encantaría llegar a algo grande. Ver que los límites no existen y que puedo llegar con mi esfuerzo me fascina. Cuando uno se esfuerza, trabaja y es constante, las cosas se van logrando y salen de esa misma llama interior, de esa pasión, de esa historia de superación", concluye Landers, que superó momentos complicados y que ya está de vuelta en las pistas, disfrutando de lo que para ella es mucho más que un deporte.